El país tiene fiebre cambiaria en ascenso y, ante ello, su presidente decidió que lo mejor era romper el "termómetro" y evitar que se publiquen las cotizaciones en portales de Internet. Sin embargo, el problema de la nación bolivariana va en aumento con reservas que se desploman. La situación actual
Por Rubén Ramallo
El presidente venezolano Nicolás Maduro anunció que su Gobierno bloqueó siete sitios de Internet con cotizaciones del dólar y el euro al margen de las tasas oficiales fijadas en el marco del control estatal de divisas en vigor hace ya una década.
Maduro, que destacó que el bloqueo ha sido ejecutado por expertos del gobierno, efectuó el anuncio en cadena nacional de radio y televisión que convocó para hacer un balance de una ofensiva contra la especulación.
"Estamos procediendo a través del Ministerio de Ciencia y Tecnología, a proteger las redes y el Internet del país, y estamos sacando fuera de las páginas web a dolartoday.com, tucadivi.com, a la lechugaverde.com, a dolarparalelovenezuela.com, al dolarparalelo.org, a preciodolar.info y a dolarparalelo.tk, quedan fuera del aire, fuera", afirmó el presidente.
Precisamente el nombre de lechuga verde es el que se suele utilizar para hacer referencia al "blue venezolano".
Pero para asombro de muchos, algunas páginas ya se han reciclado y siguen brindando información. Así por ejemplo, una de ellas informa que el parelelo cotiza a 61 bolívares, contra unos 6,3 del valor oficial.
"Estos tipos explican que ellos, todos los días, consultan el llamado dólar paralelo que es un dólar fantasma, un dólar falso, que nos lo han impuesto como parte de la guerra económica. Detrás de esto están Alberto Federico Ravell y Eligio Cedeño, que viven todos afuera, en el exterior, que valientes son ustedes", agregó Maduro.
Es una guerra que "se nos declaró desde el norte", añadió en alusión a Estados Unidos. Y agregó que "el colapso total" de la economía y de la gobernabilidad estuvo planeada para el mes pasado, empeño que se mantiene porque los opositores no renuncian a la "pelea de perros de todos contra todos", remarcó.
Los analistas destacan que la reacción del gobierno es consecuencia de un problema mucho mayor, que no se resuelve cancelando páginas de internet.
"Están queriendo romper el termómetro para no tomar conciencia de que el país está al borde del colapso", afirmó un economista consultado por iProfesional.
"El precio de la "lechuga verde" es el síntoma más evidente de la escasez de divisas, una "enfermedad" que afecta sólo a aquellas naciones que hicieron todo al revés", completó.
El dólar turista que nadie ve
Como parte de esta campaña para mejorar la situación cambiaria, en los últimos días se anunció la creación del "dólar turista", que regiría únicamente para aquellas personas que no vivan en el país, las que podrán vender anualmente u$s10.000 (o su equivalente en otras divisas) en cualquier taquilla de operadores cambiarios autorizados".
El tipo de cambio que se aplicará a estas transacciones lo determinará el Banco Central, y los operadores autorizados serán "bancos universales de naturaleza pública, así como cualquier otro ente o sujeto que el Directorio del BCV autorice a tal efecto".
No obstante, desde su anuncio, nunca se supo cuál es la tasa de cambio aplicable, que aún no fue determinada por el Banco Central.
Lo que no dijo MaduroPese a su intención de transmitir algo de tranquilidad, el gobierno de Nicolás Maduro sufre cada vez más la escasez de divisas debido, en gran medida, a las medidas restrictivas.
Según los analistas que siguen muy de cerca lo que sucede en la nación caribeña, el problema se irá agravando con el paso del tiempo.
"Hasta fin de año el Banco Central debe enfrentar vencimientos por u$s4.600 millones, lo cual entraña un verdadero desafío para el Gobierno, pues las reservas vienen en caída libre", señala un reciente informe de Barclays Capital.
Los expertos hacen referencia a que éstas han bajado a un mínimo de u$s22.000 millones. No obstante, hay analistas financieros internacionales que dan cuenta de que las reservas líquidas hoy son de apenas u$s2.500 millones.
De ser así, muestran un brutal desplome de más del 90% en apenas cuatro años.
El ministro de Finanzas, Nelson Merentes, desmintió estas cifras y dijo que su país tiene más de u$s50.000 millones, lo que le permite afrontar compromisos de deuda. Pero los analistas dan cuenta de un pequeño detalle: para llegar a ese número el funcionario incluye un préstamo de un fondo chino y las reservas de la petrolera Pdvsa.
En tanto, el informe de Barclays remarca que "la brecha está produciendo una gran crisis de balanza de pagos en cámara lenta que terminará en otra megadevaluación".
Prevén que a finales de año, o a principios de 2014, el Gobierno se verá forzado a devaluar como mínimo un 60%, para llevar el tipo de cambio de Cadivi hasta 9,95 bolívares por dólar.
El control de cambiosEn Venezuela rige desde 2003 un estricto control estatal de cambios que impide la libre compraventa de divisas -administradas de manera exclusiva por el Estado- principalmente por Cadivi que las vende de manera condicionada, en montos limitados y luego de imponer engorrosos trámites.
Cabe señalar que mientras que el tipo de cambio oficial se mantiene en 6,3 bolívares, el marginal o "lechuga verde" se cotiza a 61 bolívares, por lo que la brecha ya supera el 800%.
Cabe recordar que la adquisición de billetes verdes legales sólo se autoriza a través de dos mecanismos oficiales, ambos administrados por el Banco Central:
• La Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) -que vende dólares a 6,3 bolívares a determinados sectores y a viajeros- autorizando montos de u$s700, u$s2.500 y u$s3.000 anuales para tarjetas de crédito, según el destino.
• El Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad), que ofrece billetes mediante subastas -a un valor de entre 10 y 12 bolívares- que se convocan cada cierto tiempo, en las que también pueden participar los viajeros.
El objetivo gubernamental es que las divisas que vende Cadivi no regresen al país para ser vendidas en el ilegal "mercado negro".
A "raspar" que se acaba el mundoAnte semejante brecha cambiaria, muchos venezolanos apelan a la compra de pasajes para vuelos internacionales que pagan al tipo de cambio oficial, pero finalmente no salen del país.
"Viajar es una tentación perversa para hacerse de billetes que luego puedes vender hasta nueve veces más caros", afirma Asdrúbal Oliveros, director de la firma Ecoanalítica.
Como resultado del furor que se ha desatado por "viajar al exterior", las pantallas de las compañías aéreas muestran que están vendidos todos los asientos. No obstante, a la hora de que salga el avión, las puertas de embarque lucen casi desiertas.
"Hay venezolanos que sólo se dedican a llevar los plásticos afuera para rasparlos, es decir, para obtener dólares. Y no falta quienes se van con 10 y hasta 20 tarjetas, suyas o de conocidos", afirmó una fuente ligada al turismo.
En la jerga venezolana, "raspar" la tarjeta significa pasarla en comercios del exterior que no piden identificación al portador, al que le entregan efectivo a cambio de una comisión del 10%.
"El que raspa también recibe un porcentaje. Pero la brecha cambiaria es de tal magnitud que siempre se gana, así sea que se pague 20% o 30% de tu cupo Cadivi en gastos y comisiones y aunque se pierda el dinero del vuelo en bolívares", indica Figuera.
En las últimas semanas, el Gobierno tomó nota de esta enorme "movida" y dispuso sitios de control en los aeropuertos para tratar de detectar pasajeros que "buscan especular contra el país", con dispares resultados.
Guerra a las ganancias
Guerra a las ganancias
Horas atrás Maduro, decidió que la población concurra a una cadena de electrodomésticos y se lleve todo al 50% menos del valor.
Y adelantó que, apenas consiga los "superpoderes" en el Parlamento, lanzará medidas para limitar los márgenes de ganancia del aparato productivo y severas penas contra la especulación.
"Una vez que se apruebe la Ley Habilitante en la Asamblea Nacional, yo voy a colocar límites porcentuales a las ganancias del capital en todas las ramas de la economía del aparato productivo venezolano", afirmó.
Maduro solicitó en octubre a la Asamblea Nacional que aprobara una denominada "ley habilitante" para gobernar por decreto durante un año con el objetivo de combatir la corrupción y la especulación.
"No puede ser solamente el cierre del establecimiento, tienen que pagar con la cárcel. No es posible que mal utilicen las divisas para robar con las ventas de los productos'', agregó.
Este anuncio forma parte de una campaña de fiscalización de precios, que comenzó con la intervención de la cadena de eletrodomésticos Daka y luego de la cual sus directivos fueron detenidos tras ser tildados de especuladores.
Por Rubén Ramallo
El presidente venezolano Nicolás Maduro anunció que su Gobierno bloqueó siete sitios de Internet con cotizaciones del dólar y el euro al margen de las tasas oficiales fijadas en el marco del control estatal de divisas en vigor hace ya una década.
Maduro, que destacó que el bloqueo ha sido ejecutado por expertos del gobierno, efectuó el anuncio en cadena nacional de radio y televisión que convocó para hacer un balance de una ofensiva contra la especulación.
"Estamos procediendo a través del Ministerio de Ciencia y Tecnología, a proteger las redes y el Internet del país, y estamos sacando fuera de las páginas web a dolartoday.com, tucadivi.com, a la lechugaverde.com, a dolarparalelovenezuela.com, al dolarparalelo.org, a preciodolar.info y a dolarparalelo.tk, quedan fuera del aire, fuera", afirmó el presidente.
Precisamente el nombre de lechuga verde es el que se suele utilizar para hacer referencia al "blue venezolano".
Pero para asombro de muchos, algunas páginas ya se han reciclado y siguen brindando información. Así por ejemplo, una de ellas informa que el parelelo cotiza a 61 bolívares, contra unos 6,3 del valor oficial.
"Estos tipos explican que ellos, todos los días, consultan el llamado dólar paralelo que es un dólar fantasma, un dólar falso, que nos lo han impuesto como parte de la guerra económica. Detrás de esto están Alberto Federico Ravell y Eligio Cedeño, que viven todos afuera, en el exterior, que valientes son ustedes", agregó Maduro.
Es una guerra que "se nos declaró desde el norte", añadió en alusión a Estados Unidos. Y agregó que "el colapso total" de la economía y de la gobernabilidad estuvo planeada para el mes pasado, empeño que se mantiene porque los opositores no renuncian a la "pelea de perros de todos contra todos", remarcó.
Los analistas destacan que la reacción del gobierno es consecuencia de un problema mucho mayor, que no se resuelve cancelando páginas de internet.
"Están queriendo romper el termómetro para no tomar conciencia de que el país está al borde del colapso", afirmó un economista consultado por iProfesional.
"El precio de la "lechuga verde" es el síntoma más evidente de la escasez de divisas, una "enfermedad" que afecta sólo a aquellas naciones que hicieron todo al revés", completó.
El dólar turista que nadie ve
Como parte de esta campaña para mejorar la situación cambiaria, en los últimos días se anunció la creación del "dólar turista", que regiría únicamente para aquellas personas que no vivan en el país, las que podrán vender anualmente u$s10.000 (o su equivalente en otras divisas) en cualquier taquilla de operadores cambiarios autorizados".
El tipo de cambio que se aplicará a estas transacciones lo determinará el Banco Central, y los operadores autorizados serán "bancos universales de naturaleza pública, así como cualquier otro ente o sujeto que el Directorio del BCV autorice a tal efecto".
No obstante, desde su anuncio, nunca se supo cuál es la tasa de cambio aplicable, que aún no fue determinada por el Banco Central.
Lo que no dijo MaduroPese a su intención de transmitir algo de tranquilidad, el gobierno de Nicolás Maduro sufre cada vez más la escasez de divisas debido, en gran medida, a las medidas restrictivas.
Según los analistas que siguen muy de cerca lo que sucede en la nación caribeña, el problema se irá agravando con el paso del tiempo.
"Hasta fin de año el Banco Central debe enfrentar vencimientos por u$s4.600 millones, lo cual entraña un verdadero desafío para el Gobierno, pues las reservas vienen en caída libre", señala un reciente informe de Barclays Capital.
Los expertos hacen referencia a que éstas han bajado a un mínimo de u$s22.000 millones. No obstante, hay analistas financieros internacionales que dan cuenta de que las reservas líquidas hoy son de apenas u$s2.500 millones.
De ser así, muestran un brutal desplome de más del 90% en apenas cuatro años.
El ministro de Finanzas, Nelson Merentes, desmintió estas cifras y dijo que su país tiene más de u$s50.000 millones, lo que le permite afrontar compromisos de deuda. Pero los analistas dan cuenta de un pequeño detalle: para llegar a ese número el funcionario incluye un préstamo de un fondo chino y las reservas de la petrolera Pdvsa.
En tanto, el informe de Barclays remarca que "la brecha está produciendo una gran crisis de balanza de pagos en cámara lenta que terminará en otra megadevaluación".
Prevén que a finales de año, o a principios de 2014, el Gobierno se verá forzado a devaluar como mínimo un 60%, para llevar el tipo de cambio de Cadivi hasta 9,95 bolívares por dólar.
El control de cambiosEn Venezuela rige desde 2003 un estricto control estatal de cambios que impide la libre compraventa de divisas -administradas de manera exclusiva por el Estado- principalmente por Cadivi que las vende de manera condicionada, en montos limitados y luego de imponer engorrosos trámites.
Cabe señalar que mientras que el tipo de cambio oficial se mantiene en 6,3 bolívares, el marginal o "lechuga verde" se cotiza a 61 bolívares, por lo que la brecha ya supera el 800%.
Cabe recordar que la adquisición de billetes verdes legales sólo se autoriza a través de dos mecanismos oficiales, ambos administrados por el Banco Central:
• La Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) -que vende dólares a 6,3 bolívares a determinados sectores y a viajeros- autorizando montos de u$s700, u$s2.500 y u$s3.000 anuales para tarjetas de crédito, según el destino.
• El Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad), que ofrece billetes mediante subastas -a un valor de entre 10 y 12 bolívares- que se convocan cada cierto tiempo, en las que también pueden participar los viajeros.
El objetivo gubernamental es que las divisas que vende Cadivi no regresen al país para ser vendidas en el ilegal "mercado negro".
A "raspar" que se acaba el mundoAnte semejante brecha cambiaria, muchos venezolanos apelan a la compra de pasajes para vuelos internacionales que pagan al tipo de cambio oficial, pero finalmente no salen del país.
"Viajar es una tentación perversa para hacerse de billetes que luego puedes vender hasta nueve veces más caros", afirma Asdrúbal Oliveros, director de la firma Ecoanalítica.
Como resultado del furor que se ha desatado por "viajar al exterior", las pantallas de las compañías aéreas muestran que están vendidos todos los asientos. No obstante, a la hora de que salga el avión, las puertas de embarque lucen casi desiertas.
"Hay venezolanos que sólo se dedican a llevar los plásticos afuera para rasparlos, es decir, para obtener dólares. Y no falta quienes se van con 10 y hasta 20 tarjetas, suyas o de conocidos", afirmó una fuente ligada al turismo.
En la jerga venezolana, "raspar" la tarjeta significa pasarla en comercios del exterior que no piden identificación al portador, al que le entregan efectivo a cambio de una comisión del 10%.
"El que raspa también recibe un porcentaje. Pero la brecha cambiaria es de tal magnitud que siempre se gana, así sea que se pague 20% o 30% de tu cupo Cadivi en gastos y comisiones y aunque se pierda el dinero del vuelo en bolívares", indica Figuera.
En las últimas semanas, el Gobierno tomó nota de esta enorme "movida" y dispuso sitios de control en los aeropuertos para tratar de detectar pasajeros que "buscan especular contra el país", con dispares resultados.
Guerra a las ganancias
Guerra a las ganancias
Horas atrás Maduro, decidió que la población concurra a una cadena de electrodomésticos y se lleve todo al 50% menos del valor.
Y adelantó que, apenas consiga los "superpoderes" en el Parlamento, lanzará medidas para limitar los márgenes de ganancia del aparato productivo y severas penas contra la especulación.
"Una vez que se apruebe la Ley Habilitante en la Asamblea Nacional, yo voy a colocar límites porcentuales a las ganancias del capital en todas las ramas de la economía del aparato productivo venezolano", afirmó.
Maduro solicitó en octubre a la Asamblea Nacional que aprobara una denominada "ley habilitante" para gobernar por decreto durante un año con el objetivo de combatir la corrupción y la especulación.
"No puede ser solamente el cierre del establecimiento, tienen que pagar con la cárcel. No es posible que mal utilicen las divisas para robar con las ventas de los productos'', agregó.
Este anuncio forma parte de una campaña de fiscalización de precios, que comenzó con la intervención de la cadena de eletrodomésticos Daka y luego de la cual sus directivos fueron detenidos tras ser tildados de especuladores.
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